Bajo la tenue luz de la sala de descanso de la empresa, él la ató con firmeza a la silla y le miró fijamente a los ojos. "La verdad es que quieres acostarte conmigo, ¿verdad?", susurró con una sonrisa maliciosa dibujada en los labios. Su corazón latía con fuerza, una mezcla de miedo y deseo embriagaba su mente. ¿Cómo podía haber llegado a esa situación con su jefe? Cada segundo se volvía más intenso, más peligroso. En un instante, todo cambió. Los roles se invertían, las emociones se desataban y la verdad saldría a la luz de la forma más inesperada. ¿Qué se escondía detrás de esa aparente confesión? ¿Y qué consecuencias tendría para ambos en el complicado mundo laboral en el que se encontraban atrapados? Un juego de seducción, de poder, de secretos enterrados en lo más profundo de sus almas se desataba en esa habitación silenciosa, prometiendo cambiar sus vidas para siempre.