En el reino lejano de Montecielo, el príncipe Bastián se enfrentaba a su desafío más grande: conquistar el corazón de la princesa imperial Lysandra. A pesar de su origen humilde, Bastián había demostrado ser valiente y astuto, pero la princesa se negaba a recibirlo en su presencia.
Determinado a no rendirse, el príncipe ideó un plan audaz. En una osada jugada, se infiltró en el palacio imperial disfrazado de trovador y cautivó a todos con su música y su encanto. Lysandra, cautelosa al principio, encontró en las melodías del misterioso trovador una chispa de emoción que creía perdida.
Pero cuando la verdad salió a la luz y Bastián reveló su identidad, la princesa se sintió traicionada y herida. Sin embargo, en lo más profundo de su corazón, una semilla de admiración por el príncipe había germinado. ¿Podría el amor florecer entre dos almas destinadas a estar separadas por la eternidad, o la venganza consumiría sus corazones para siempre? La respuesta yacía en los cien besos prometidos entre ellos, cada uno cargado de secretos y promesas aún no reveladas.