Bajo la luz plateada de la luna, El Dios de la Luna se erguía con orgullo, observando con desdén a su contraparte, El Dios del Yaoi. Sus ideales conservadores chocaban directamente con la mentalidad abierta y liberal de este último. La tensión entre los dos dioses era palpable en el aire, amenazando con desencadenar una tormenta en el paraíso.
El Dios de la Luna, con su voz grave y autoritaria, declaró: "El amor debe seguir las reglas establecidas, entre hombre y mujer, como siempre ha sido". Sin embargo, El Dios del Yaoi, con una sonrisa desafiante en los labios, respondió: "El amor no conoce fronteras, ni géneros. El amor es libre y poderoso".
La disputa entre los dos dioses dividió a los habitantes del cielo, algunos apoyando la tradición y otros abogando por la igualdad y la libertad. Mientras tanto, en lo más profundo de sus corazones, tanto El Dios de la Luna como El Dios del Yaoi guardaban secretos y heridas del pasado que los habían llevado a ser quienes eran ahora.
¿Podrán estos dos dioses tan opuestos encontrar un terreno común? ¿O su conflicto llevará al cielo a la ruina? El destino de todos los seres celestiales pendía de un hilo, mientras la batalla entre la tradición y la modernidad se desataba en los cielos.