En una noche de luna llena, Eunha se encontró cara a cara con Siyeon en medio de un claro del bosque. La tensión era palpable, el silencio entre las dos mujeres era inquebrantable. Finalmente, Siyeon rompió el hielo con una voz temblorosa, "Eunha, siento mucho haber hecho lo que hice en el pasado. Pero necesito que me escuches, necesito explicarte..."
Sin embargo, antes de que Siyeon pudiera terminar su frase, un destello de luz cegadora las rodeó, convirtiendo el bosque en un remolino de colores brillantes. De la luz emergió una figura encapuchada, con ojos centelleantes que las observaban fijamente. "¡Eunha, Siyeon!," la figura habló con voz estridente, "El elixir que una vez separó sus destinos ha desatado fuerzas mágicas peligrosas que amenazan con destruir todo a su paso."
Eunha y Siyeon intercambiaron miradas, sabiendo que su pasado estaba más entrelazado con la magia de lo que jamás hubieran imaginado. Ahora, no solo debían enfrentar sus propios demonios internos, sino también una oscura magia ancestral que las obligaba a unir fuerzas para sobrevivir. ¿Podrían dejar de lado el dolor del pasado y encontrar juntas el poder para enfrentar este nuevo desafío?