Bajo la luz tenue de la luna, Martín caminaba solo por las calles desiertas de la ciudad después de una larga jornada de trabajo. De repente, un escalofrío recorrió su espalda cuando sintió la presencia de alguien detrás de él. Al girarse, se quedó sin aliento al ver a Diego, su amigo de la infancia que desapareció misteriosamente hace 8 años. Diego lo miraba fijamente, con una sonrisa siniestra en el rostro.
El encuentro casual se convirtió en un extraño juego de persecución, donde Diego seguía a Martín a donde quiera que fuera. Al principio, Martín se sentía intrigado y emocionado por el regreso de su viejo amigo, pero pronto las cosas tomaron un giro oscuro. Diego se volvía cada vez más posesivo y obsesivo, desvelando un lado de su personalidad que Martín jamás había imaginado. ¿Qué secretos ocultaba Diego durante todos esos años de ausencia? ¿Y hasta dónde llegaría en su obsesión por estar "dentro de Martín"? La línea entre la amistad y la locura se desdibujaba cada vez más, sumergiendo a ambos en un torbellino de emociones turbulentas y peligrosas.