Bajo la luz de la luna, Lean Olgott se adentró en el bosque prohibido siguiendo el suave llamado de la bestia sagrada. Su corazón latía con fuerza, mezclando emoción y temor en cada latido. ¿Qué estaría esperándolo más allá de los oscuros árboles? Mientras avanzaba, una niebla misteriosa comenzó a rodearlo, difuminando los límites entre la realidad y la fantasía.
De repente, una voz resonó en su mente, profunda y llena de sabiduría antigua. "Lean Olgott, el niño amado por Dios", susurró la voz, enviando escalofríos por la espalda del joven. Con pasos vacilantes, Lean se adentró en una clara iluminada por luciérnagas brillantes, revelando la imponente figura de la bestia sagrada.
Ante sus ojos asombrados, la criatura majestuosa se inclinó en reverencia, reconociendo la pureza y bondad en el corazón de Lean. Con un destello de luz, la bestia sagrada extendió su enorme garra y tocó la frente del joven, desatando un poder ancestral que fluía a través de sus venas.
Desde ese momento, Lean supo que su vida ya no sería la misma. Con el peso de un destino más grande que él mismo sobre sus hombros, se embarcó en un viaje épico hacia lo desconocido, listo para enfrentar desafíos inimaginables y descubrir el verdadero significado de ser "El niño amado por Dios".