Nada podría detener el latido desbocado de su corazón al verlo de nuevo. Nazuna se prometió a sí misma que ya no sentiría nada por Ichikawa Nao, el chico que una vez rompió su corazón en pedazos. Sin embargo, al cruzarse con él en la estación de tren, todos los sentimientos enterrados volvieron a emerger con una fuerza abrumadora.
La mirada de Nao se encontró con la de Nazuna, y por un instante, el mundo pareció detenerse a su alrededor. En ese momento de silencio tenso, Nazuna pudo ver una mezcla de sorpresa y arrepentimiento en los ojos de Nao. ¿Sería posible que él también siguiera sintiendo algo por ella?
Mientras el tren se aproximaba, Nazuna se vio atrapada en un torbellino de emociones contradictorias. ¿Debería perdonar al chico que le había causado tanto dolor en el pasado? ¿O debería seguir adelante y abrir su corazón a nuevas oportunidades de amor?
La respuesta a esas preguntas se volvía cada vez más confusa a medida que Nazuna luchaba por comprender sus propios sentimientos. En ese momento crucial, el destino les daría la oportunidad de enfrentar su pasado y decidir el curso de su futuro juntos.