Cerca de la medianoche en el elegante salón de baile, Gakupo y Luka se encontraron cara a cara. Sus miradas se cruzaron en un juego de provocación y desafío. Él, con su elegancia salvaje y misteriosa, y ella, con su belleza serena pero intensa. Bailaron juntos, cuerpos fusionándose en movimientos fluidos y pasionales, mientras la música llenaba el espacio con su melodía envolvente.
Sin embargo, detrás de las sonrisas y los gestos corteses, se escondían secretos oscuros y deseos prohibidos. Gakupo guardaba un pasado tormentoso que lo atormentaba en las noches solitarias, mientras Luka ocultaba una vulnerabilidad que solo él lograba ver. En medio de la multitud, se encontraron solos, perdidos en un torbellino de emociones encontradas.
Cuando la canción llegó a su fin, el silencio tenso los envolvió. Fue entonces cuando él tomó su rostro entre sus manos, mirándola profundamente a los ojos. "¿Por qué me huyes, Luka?", susurró con voz ronca, revelando la verdad detrás de su mirada fría. Los corazones latían desbocados, la tensión entre ellos llegaba a su punto máximo. En ese momento, se dieron cuenta de que, en medio de la elegancia y el encanto, ardía una pasión irrefrenable que amenazaba con consumirlos por completo.