Título: Las circunstancias de beber sangre de la familia Hiiragi
En medio de la noche, cuando la mansión Hiiragi parecía sumida en un profundo silencio, Shouta escuchó un susurro tenue proveniente de la habitación contigua. Intrigado, abrió la puerta lentamente y quedó paralizado al ver a Yuki, la hermosa hija mayor de la familia, quien sostenía en sus manos un frasco lleno de un líquido carmesí.
"¿Qué estás haciendo aquí, Shouta?", susurró Yuki con una sonrisa nerviosa en los labios, sus ojos brillando con una mezcla de miedo y complicidad.
El corazón de Shouta latía desbocado mientras observaba cómo Yuki se acercaba con pasos delicados, el frasco de sangre destilando un brillo siniestro a la luz de la luna. Antes de que pudiera articular palabra, Yuki levantó el frasco y con un gesto rápido, derramó unas gotas de sangre sobre su muñeca.
"¡Bebe, Shouta! Es la única forma de comprender nuestro secreto", instó Yuki con una urgencia palpable en su voz, sus ojos buscando desesperadamente los de él.
Sin poder resistirse a la tentación y atraído por un poder oculto, Shouta acercó sus labios a la herida abierta de Yuki y probó el liquido escarlata que fluía de ella. En ese instante, una oleada de sensaciones desconocidas invadió su ser, revelándole la verdad detrás de la familia Hiiragi y cambiando su destino para siempre.