Marin estaba completamente abrumada por sus poderes sobrenaturales. Desde pequeña podía ver y comunicarse con los espíritus, algo que la había aislado de los demás y la hacía sentirse diferente. Pero todo cambió cuando conoció a Yūrie, un fantasma misterioso en la nueva escuela secundaria a la que asistía.
Yūrie no sólo era un espíritu amable y comprensivo, sino que también le prometió ayudar a Marin a conquistar al chico que le gustaba. Sin embargo, a medida que su amistad crecía, Marin descubrió que Yūrie guardaba oscuros secretos que podrían poner en peligro a todos los que ella amaba.
La joven se encontró atrapada entre su deseo de encajar en la escuela y la lealtad hacia su amigo fantasmal. ¿Podría confiar en Yūrie o sus intenciones eran más peligrosas de lo que parecían? A medida que los eventos se desarrollaban, Marin se vio envuelta en una red de misterio, romance y peligro, donde cada decisión que tomaba la acercaba más a la verdad, pero también la alejaba de todo lo que conocía.