Título: Đường Cong Sữa
Sayo estaba parada frente a la puerta de Nao, con el corazón latiéndole con fuerza en el pecho. Sabía que este era su momento, la última oportunidad para confesar sus sentimientos antes de que Nao se mudara para siempre. Con las manos temblorosas, tocó el timbre y esperó, con la respiración entrecortada, a que él abriera la puerta.
Nao apareció frente a ella, con una mirada de sorpresa en sus ojos. Antes de que pudiera decir una palabra, Sayo tomó una profunda bocanada de aire y dejó salir todas las emociones que había guardado por tanto tiempo. Le confesó su amor, su deseo de estar a su lado, de ser algo más que amigos de la infancia.
Nao la miraba en silencio, con una expresión indescifrable en su rostro. Sayo sintió como si el tiempo se hubiera detenido, como si estuvieran suspendidos en el espacio, solos en su pequeño universo. Y entonces, inesperadamente, Nao se acercó a ella y la tomó de la mano.
"Yo también siento lo mismo, Sayo", susurró Nao, con una sonrisa tímida en los labios. "Siempre te he visto como algo más que una hermana menor, pero nunca supe cómo decirlo".
Sayo sintió cómo se llenaba de felicidad, cómo todas sus dudas y miedos se desvanecían en ese momento. Se abrazaron con fuerza, sabiendo que su amor era real, que juntos podrían enfrentar cualquier desafío que la vida les pusiera en el camino.
Así, bajo el manto brillante de la Vía Láctea, Sayo y Nao se prometieron amor eterno, sabiendo que su destino estaba escrito en las estrellas.