En un mundo sombrío y desolado, donde la quietud reina y el silencio es eterno, Mukai, un niño de mirada profunda, se encontró con Aria, una niña de cabello plateado que irradiaba luz en la oscuridad. Ambos parecían ser los únicos seres con vida en un paisaje congelado en el tiempo.
Mukai y Aria, sin saber por qué, eran los únicos capaces de moverse en un mundo inmóvil. Intrigados por este misterio, comenzaron a explorar las tierras desoladas, buscando respuestas en un entorno donde la decadencia y la desolación se entrelazaban.
A medida que se adentraban en lo desconocido, descubrieron que en realidad estaban atrapados en un sueño colectivo, donde sus pensamientos y emociones moldeaban la realidad a su alrededor. Mukai, con su corazón lleno de dolor y culpa, y Aria, con su inocencia y esperanza inquebrantables, representaban fuerzas opuestas que luchaban por dar forma al mundo que los rodeaba.
A medida que su conexión se hacía más profunda, Mukai y Aria se vieron envueltos en una batalla interna entre el deseo de escapar de ese sueño eterno y el miedo a enfrentar la verdad que se escondía detrás de su existencia en ese mundo suspendido en el tiempo. ¿Estarían destinados a ser los salvadores de un mundo olvidado o simplemente marionetas de un destino más cruel de lo que podían imaginar?