Título: El Padre de mi Amiga.
Me enamoré del padre de mi mejor amiga, una atracción prohibida que consumía mis pensamientos. Una noche, decidí hablar con él, confrontar mis sentimientos prohibidos. Con el corazón latiéndome con fuerza, toqué a su puerta y entré en su habitación, buscando respuestas.
"¿Acaso no me ves como una mujer?", le pregunté, buscando desesperadamente su mirada, buscando una chispa de deseo en sus ojos. Su rostro reflejaba sorpresa y conflicto, una batalla interna entre la razón y la tentación. En ese momento, supe que algo dentro de él también se encendió.
A medida que nuestras miradas se encontraban en la penumbra de la habitación, el silencio se hacía abrumador. Podía sentir el pulso acelerado de ambos, el peso de lo que acababa de confesar colgando en el aire. ¿Qué pasaría ahora? ¿Se atrevería a cruzar esa línea prohibida? ¿O seríamos consumidos por la culpabilidad y el remordimiento?
Nuestra historia apenas comenzaba, un torbellino de emociones y deseos que amenazaba con destruirlo todo. ¿Podríamos encontrar la fuerza para seguir adelante, para luchar contra los prejuicios y las convenciones sociales? Solo el tiempo lo diría, pero una cosa era segura: nuestras vidas habían sido irreversiblemente entrelazadas en un juego peligroso de amor y deseo.