Entre los antiguos muros de un castillo en ruinas, los ecos de una profecía olvidada inundaban el aire polvoriento. Ni Yu, la elegida del Clan de la Divinidad, se erguía frente a sus enemigos con la fuerza de mil titanes en sus ojos. Heredera de un poder ancestral, su destino estaba sellado por la voluntad de los dioses.
Mientras luchaba por proteger a su pueblo de la oscuridad que amenazaba con devorarlo, Ni Yu se encontró rodeada de intrigas y traiciones. Aquellos que juraron lealtad a ella susurraban palabras envenenadas a sus espaldas, esperando el momento oportuno para clavar un puñal en su corazón.
Pero Ni Yu no era una reina corriente. Con un harem de valientes guerreros a su servicio, desafiaba las normas establecidas y enfrentaba la injusticia con valentía. Cada paso que daba resonaba como un trueno en el silencio de la noche, desafiando al destino mismo a detenerla.
Enfrentando la adversidad con coraje, Ni Yu se alzaba como una llama ardiente en medio de la tormenta, dispuesta a escribir su propia historia en los anales del tiempo. Su linaje, marcado por la divinidad, brillaba con una luz deslumbrante en la oscuridad que amenazaba con consumirla.