Desde lo alto de la torre, Valentina observaba con melancolía el bullicioso jardín del palacio. Los rayos del sol acariciaban la hierba verde mientras los niños correteaban sin cesar, seguidos de cerca por dos misteriosos gatos negros. Sin saber por qué, una sensación de competencia invadió su corazón. ¿Qué estarían buscando aquellos pequeños correteando como si sus vidas dependieran de ello?
La joven princesa suspiró, deseando que aquel encantador espectáculo pudiera perdurar eternamente, sin los engranajes del destino que parecían estar en marcha. ¿Acaso aquella carrera sin rumbo, aquel "Caucus Race", tenía algún significado oculto que escapaba a su entendimiento?
De repente, un sonido estridente resonó en el aire, rompiendo la armonía del momento. Al volverse, Valentina vio a uno de los gatos negros lanzarse hacia un arbusto cercano, revelando un oscuro túnel que se adentraba en lo desconocido. Sin pensarlo dos veces, la princesa se aventuró valientemente en su interior, desatando así una serie de acontecimientos que cambiarían su destino para siempre...