Bajo el cielo estrellado, Meng Fan se adentraba en el oscuro bosque en busca de las hierbas especiales que podrían salvar la vida de su madre enferma. Con el corazón lleno de determinación, el joven campesino no se detenía ante nada. Sin embargo, el peligro acechaba en cada sombra, listo para devorarlo en un instante.
De repente, un ruido siniestro rompió el silencio de la noche. Meng Fan se encontró frente a frente con una figura misteriosa, una mujer de ojos centelleantes que parecía emanar un poder sobrenatural. Con una voz suave pero firme, la mujer le ofreció un trato que cambiaría su destino para siempre.
"Te fortaleceré, pero a cambio, deberás cumplir tres promesas sagradas", susurró la mujer en un tono enigmático.
Sin saber las consecuencias de aceptar el trato, Meng Fan asintió con determinación. Un aura brillante envolvió su cuerpo, transformándolo en un guerrero formidable. Con cada paso que daba, podía sentir el poder antiguo fluyendo por sus venas, haciéndolo más fuerte, más rápido, más mortal.
Pero, a medida que Meng Fan se adentraba en esta nueva realidad llena de peligros y secretos, comenzó a cuestionar su decisión. ¿Podría cumplir las promesas que había hecho en un momento de desesperación? ¿Y qué oscuros secretos se escondían detrás de la apariencia tranquila de su misteriosa benefactora?
El destino de Meng Fan estaba entrelazado con fuerzas más allá de su comprensión, y solo el tiempo revelaría si se convertiría en el Rey de los dioses o caería en la oscuridad eterna.