Bajo la luz de dos soles, Yasai se paró en la cúspide de la montaña, observando el extenso valle que se extendía ante él. Aquel mundo desconocido estaba lleno de criaturas poderosas y seres misteriosos que desafiaban su comprensión. Su misión original de aniquilar a los insectoides se desvaneció en su mente mientras se adentraba en un territorio donde la ley del más fuerte era la única que importaba.
Durante su travesía, se encontró con un guerrero legendario cuyo poder rivalizaba con el de los dioses, un ser tan antiguo como el propio universo. Este guerrero le reveló la verdad sobre su origen y el destino que lo aguardaba: conquistar cada uno de los mundos y universos que se interponían en su camino, desafiando incluso a los mismos cielos.
Con cada batalla ganada, Yasai sentía cómo su poder crecía y su sed de victoria se volvía insaciable. Pero en lo más profundo de su ser, una pregunta persistente lo atormentaba: ¿era él verdaderamente el amo de su propio destino, o solo una marioneta en manos de fuerzas más allá de su comprensión?
Sumergido en un mar de conflictos internos y externos, Yasai se preparaba para enfrentar su mayor desafío hasta el momento: confrontar a los inmortales que reinaban en la oscuridad, desafiando su legado divino y reclamando su lugar como el guerrero más poderoso en el universo ilimitado.