En medio de la noche en la Escuela de Brujas, Alice se encontraba en su habitación, debatiéndose entre dos mundos: el de los humanos y el de las brujas. La llegada de Mari, la estudiante nueva y desprevenida, trastocó su mundo por completo. Mari, con su inocencia y curiosidad, despertó en Alice sentimientos que creía haber enterrado bajo capas de amargura y venganza.
Entre risas y miradas furtivas, Alice se dio cuenta de que ya no podía luchar contra lo inevitable. El hechizo del amor se había apoderado de su corazón, amenazando con arrebatarle no solo sus poderes, sino también su propia identidad como bruja.
En medio del caos de emociones, Alice se vio obligada a elegir entre el deber hacia su raza y la pasión que la consumía desde el momento en que conoció a Mari. ¿Podría resistirse a la tentación del amor prohibido, o sucumbiría a la fuerza imparable de sus propios sentimientos? El destino de las brujas y los humanos pendía de un hilo, mientras el oscuro secreto que rodeaba a Mari amenazaba con desencadenar una tormenta que lo arrasaría todo.