Título: Sobrecarga
En la fría noche de invierno, Dio se encuentra solo en su habitación del cuartel, con el corazón lleno de incertidumbre y miedo. Ha llegado el momento de confesar sus sentimientos a Aidan, el hombre por el cual su corazón late desenfrenadamente en cada encuentro. Con manos temblorosas, Dio se sumerge en un mar de recuerdos, recordando cada sonrisa, cada gesto amable que Aidan le ha regalado.
Decidido a no dejar que el arrepentimiento lo consuma, Dio busca a Aidan en los rincones oscuros del cuartel, donde la luz de la luna se filtra entre las grietas de las paredes. Cuando finalmente lo encuentra, susurra su nombre en un hilo de voz, apenas audible en la quietud de la noche.
Y entonces, en medio de la penumbra, Aidan se gira lentamente hacia él, con una mirada intensa que hace que el corazón de Dio se acelere aún más. Sin decir una palabra, Aidan se acerca a él, tomando su rostro entre sus manos con ternura, sellando su confesión con un beso apasionado que enciende una chispa en sus almas.
En ese instante, en medio de la oscuridad y el silencio, Dio y Aidan descubren un nuevo comienzo, donde el amor florece entre las sombras del deber y la pasión arde más brillante que nunca. Juntos, se sumergen en un torbellino de emociones prohibidas, dispuestos a luchar contra viento y marea por su amor, sin importar las consecuencias que puedan enfrentar en el camino.