Bajo el cielo estrellado de una noche de verano, Lucas y sus viejos amigos se reunieron alrededor de una fogata crepitante. Entre risas y bromas, cada uno comenzó a compartir sus historias sobre las mujeres en sus vidas. Pero lo que parecía ser solo una charla inocente pronto se convirtió en algo más.
Lucas, el narrador de la noche, habló sobre Elisa, la chica que una vez lo hizo sentir invencible. Pero a medida que profundizaba en su relato, los ojos de sus amigos se abrieron de par en par, sorprendidos por los giros inesperados de la historia. Resultó que Elisa no era solo una chica común y corriente, sino la Diosa de los Sueños, capaz de convertir las fantasías en realidad.
Intrigados, los amigos escucharon con asombro cada detalle de la conexión entre Lucas y Elisa, una historia llena de pasión, misterio y, sobre todo, un amor que desafiaba los límites de la realidad. Mientras la fogata crepitaba y las sombras bailaban a su alrededor, se dieron cuenta de que las historias de Lucas iban más allá de lo que jamás hubieran imaginado.
La noche en la Tierra de las fantasías había comenzado, y con cada palabra susurrada por Lucas, el velo entre la fantasía y la realidad se desvanecía, dejando al descubierto un mundo de posibilidades inexploradas. ¿Podría ser cierto que Elisa, la Diosa de los Sueños, realmente existía? Y si era así, ¿qué otras maravillas les aguardaban en ese mágico lugar donde los deseos se convertían en verdad?