En la víspera del cumpleaños de Nico-chan, Maki se encontraba nerviosa y emocionada al mismo tiempo. Había planeado una sorpresa especial para su amiga, pero las dudas la invadían. ¿Sería suficiente? ¿Gustaría a Nico?
El día llegó y Nico, sin saber nada, se preparaba para un día normal. Sin embargo, al abrir la puerta de su habitación, se encontró con un pasillo lleno de globos y guirnaldas. Sorprendida, siguió el camino que la llevó al jardín de la escuela, donde todos sus amigos la esperaban con una enorme tarta y regalos.
Maki se acercó tímidamente a Nico y le entregó un pequeño paquete envuelto con un lazo rojo. Al abrirlo, los ojos de Nico se llenaron de lágrimas al descubrir una pulsera con una placa que decía: "Amigas por siempre". En ese momento, se dio cuenta del amor y la dedicación que Maki le había brindado.
La celebración continuó con risas, abrazos y confesiones de amistad. Nico agradeció a Maki con un abrazo sincero, prometiendo que ese sería el mejor cumpleaños de su vida. Y así, entre sonrisas y complicidad, la amistad entre Maki y Nico se fortaleció aún más.