Cuando Akane y Fumi subieron juntas al escenario, la magia comenzó a fluir. La voz potente y segura de Akane se entrelazaba perfectamente con la delicadeza y la emoción que Fumi transmitía con cada nota. Esa noche, el público enmudeció, cautivado por la armonía que irradiaban las dos amigas.
Sin embargo, detrás de esas sonrisas radiantes y melodías perfectas, se escondían secretos enterrados en lo más profundo de sus corazones. Akane, con su determinación feroz, había sacrificado todo por su carrera, incluso su amistad con Fumi. La felicidad parecía estar al alcance de su mano, pero a un alto precio.
Fumi, por otro lado, luchaba con sus propios demonios internos. Guardaba en silencio sus inseguridades y miedos, temiendo perder a Akane y la única conexión verdadera que había encontrado en mucho tiempo. ¿Podrían superar los obstáculos que amenazaban con separarlas, o la música que las unía también sería la causa de su ruptura?
Mientras el telón caía al final de su actuación, ambas sabían que el destino les deparaba más desafíos. El brillo de las luces del escenario iluminaba un camino incierto, donde sus voces resonarían no solo en las melodías, sino también en las profundidades de sus almas entrelazadas por una canción de amistad y amor inquebrantable.