Noche tras noche, un misterioso ser con piel roja emergía de las sombras, su presencia inundando de temor las calles desiertas. Los niños, al verlo acercarse con paso lento y sigiloso, sentían un escalofrío recorrerles la espalda. Cada vez que se detenía frente a uno de ellos, una pregunta resonaba en la oscuridad: "¿Qué es lo que deseas? ¿Qué es lo que anhelas?".
Nadie sabía de dónde venía ni cuál era su propósito, pero su mirada penetrante revelaba una sabiduría antigua y un poder sobrenatural. Algunos niños, tentados por la promesa de cumplir sus sueños más anhelados, se atrevían a responder. Sin embargo, aquellos que sucumbían a la tentación pronto descubrían el oscuro precio que debían pagar.
Bajo la brillante luz de la luna, se desataba un torbellino de emociones, deseos y miedos entrelazados en una danza peligrosa. Los lazos del destino se estrechaban alrededor de los corazones de los niños, revelando sus verdaderas intenciones y sus más profundos temores. En medio de la noche, entre sombras y susurros, se gestaba un drama sobrenatural que pondría a prueba la valentía y la determinación de aquellos que se atrevieran a desafiar al ser de rojo.
Y así, en cada noche oscura y silenciosa, la pregunta resonaba una vez más, invitando a los niños a enfrentar sus propios demonios y descubrir el verdadero significado de sus deseos más profundos. Nada en este mundo mágico era lo que parecía, y cada decisión tomada en la oscuridad de la noche tenía el poder de cambiar el destino de aquellos que se atrevieran a soñar.