En la noche oscura, Kim Mu-Ryeong se paró frente a la imponente mansión donde se decía que residía un espíritu maligno. Sus manos temblaban ligeramente mientras sostenía su cuaderno de notas, preparándose para la difícil tarea de exorcizar al ente oscuro que habitaba allí. Sin embargo, lo que no esperaba era encontrarse con Ki Hwan Young, el enigmático joven al que prefería evitar a toda costa.
Con una mirada fría y distante, Ki Hwan Young se acercó a Mu-Ryeong y susurró: "Últimamente, siento los hombros muy pesados". Mu-Ryeong sintió un escalofrío recorrer su espalda, sabiendo que algo no estaba bien. ¿Por qué Ki Hwan Young, conocido por su actitud arrogante y solitaria, había acudido a él en busca de ayuda?
A medida que Mu-Ryeong y Ki Hwan Young comenzaron a investigar juntos el origen de la presencia maligna en la mansión, descubrieron secretos oscuros que los llevaron por un camino peligroso y desconocido. Pronto se dieron cuenta de que la verdadera batalla no era solo contra el espíritu maligno, sino también contra sus propios demonios internos.
Entre misterios sin resolver y la creciente tensión entre Mu-Ryeong y Ki Hwan Young, su relación pasó de la aversión mutua a algo mucho más profundo y complicado. ¿Podrían unir sus fuerzas para enfrentar la oscuridad que los rodeaba, o serían consumidos por ella? Una historia de amor, intriga y magia oscura estaba a punto de desplegarse en la noche eterna de Mu-Ryeong y Ki Hwan Young.