Baño de luz de la luna iluminaba el bosque, dándole un aire místico y sobrenatural. Hotaru, una joven valiente pero temerosa, se adentró en el lugar prohibido donde se decía que habitaban los espíritus. En ese momento, un espíritu misterioso llamado Gin se materializó frente a ella, con ojos tan profundos que parecían contener los secretos del universo. Hotaru quedó cautivada por su presencia, pero una barrera invisible los separaba, impidiéndole tocarlo por miedo a que desapareciera. Gin sonrió con tristeza al notar la distancia entre ellos, pero algo en su mirada sugería un deseo secreto, una promesa no dicha. ¿Podría el vínculo entre ellos trascender las barreras entre el mundo humano y el mundo de los espíritus? Los latidos de sus corazones resonaban en la quietud de la noche, creando una melodía de amor y destino entrelazados.