Trong một buổi lễ tốt nghiệp sôi động, Mutou vẫn đứng nơi đó với bức mặt không hình, thu hút sự chú ý của mọi người bằng vẻ đẹp độc đáo của mình. A pesar de no tener un rostro tradicional, su corazón latía con fuerza por Kaori, la chica que había capturado su corazón desde hace mucho tiempo. Kaori, sin darse cuenta de su amor, estaba ocupada disfrutando de la ceremonia con otros amigos. Mutou, desde lo profundo de su silencio, estaba decidido a revelar sus sentimientos.
Con determinación en sus acciones, Mutou escribió una carta de amor para Kaori, expresando todos sus pensamientos y emociones guardados en su corazón silencioso. Cuando ella finalmente leyó la carta, un remolino de emociones llenó su ser. La sorpresa se reflejaba en sus ojos al darse cuenta de la profundidad del amor de Mutou a pesar de su apariencia única.
En medio de la multitud que observaba expectante, Kaori buscó a Mutou con la mirada, finalmente encontrando sus ojos vacíos que brillaban con amor y sinceridad. En ese momento, en un giro inesperado del destino, Kaori comprendió que el verdadero encanto de un hombre no radica en su rostro, sino en la pureza de su corazón. Y así, en ese instante mágico, Mutou y Kaori se encontraron verdaderamente el uno al otro, más allá de las limitaciones de la apariencia física.