Título: Pittosporum.
En la tranquila oscuridad de la noche en el internado, Hisaya Yano se aventuró a través de los pasillos silenciosos, con el corazón latiendo con fuerza por la emoción de desafiar una vez más las reglas. Esta vez, decidió llevar a un grupo de chicas a los dormitorios de los chicos, desafiando el toque de queda impuesto por la escuela.
Sin embargo, al abrir la puerta de su habitación, se encontró con una escena que lo dejó completamente desconcertado y, al mismo tiempo, excitado. Su compañero de habitación, Sono Odajima, estaba teniendo una relación íntima con otro chico. Hisaya no pudo apartar la vista, sintiendo una mezcla de culpa y deseo burbujeando dentro de él.
Sono, con una actitud sorprendentemente tranquila, se acercó a Hisaya y lo obligó a enfrentar su propia reacción física. Mientras luchaba con su erección, Hisaya se enfrentó a una confusión abrumadora. Todos lo veían como el alumno ejemplar, pero en realidad, estaba atrapado en un torbellino de sentimientos románticos y un profundo trauma emocional que lo consumía por dentro.
Entre miradas intensas y susurros en la noche, los lazos entre Hisaya y Sono comenzaron a cambiar, revelando capas profundas de emociones y deseos reprimidos. En medio de la oscuridad, surgía una historia de amor prohibido y pasión desenfrenada, sacudiendo los cimientos de la aparente calma del internado.