En un giro inesperado de los eventos, Alice se encuentra cara a cara con los tres líderes del mundo caótico en el que está atrapada. Mientras Rabbit lucha valientemente a su lado, Alice se da cuenta de que la clave para salvarse a sí misma y a su amigo no reside en la fuerza bruta, sino en la astucia y en el poder de su imaginación.
Con rápida determinación, Alice ideó un plan ingenioso para distraer a los líderes mientras Rabbit buscaba una salida. Utilizando las últimas gotas de la poción mágica que le quedaban, Alice se encogió hasta el tamaño de un dedo y se deslizó por entre los pies de los gigantes, esquivando sus ataques con agilidad y destreza.
Mientras tanto, Rabbit logró encontrar una grieta en la pared de ilusiones que rodeaba aquel mundo surrealista. Con valentía, se abalanzó hacia ella, esperando que del otro lado se encontrara la libertad.
Mientras la batalla entre Alice y los líderes se intensificaba, un grito desgarrador resonó en toda la dimensión, señal de que Rabbit había logrado escapar. Con un último esfuerzo, Alice logró inmovilizar a los líderes, devolviendo a los cuentos de hadas la armonía que tanto habían perdido. Pero su camino hacia la libertad aún no había terminado, pues nuevos desafíos y peligros la esperaban en las sombras del horizonte desconocido.