En una noche tormentosa en el misterioso país de las maravillas, Alicia se encontraba mirando por la ventana, con la mirada perdida en la lluvia que golpeaba con fuerza los cristales. Se preguntaba cuál sería el motivo detrás de la actitud fría y distante de Julius, el relojero con el que había contraído matrimonio recientemente. Desde que se habían casado, Alicia había intentado ganarse su corazón sin éxito, pero esa noche, todo estaba a punto de cambiar.
De repente, un rayo cayó cerca de la casa, iluminando la habitación con una luz cegadora. Alicia sintió un escalofrío recorrer su cuerpo, mientras algo extraño comenzaba a suceder a su alrededor. Los relojes de la habitación empezaron a girar descontroladamente, marcando una hora que no existía en ningún otro lugar.
Julius, con una expresión de sorpresa en su rostro, se acercó a Alicia y la tomó de la mano. En ese momento, en medio de la tormenta, sus corazones latían al unísono, con una fuerza que trascendía el tiempo y el espacio. Ahí, en la oscuridad de la noche, ambos comprendieron que estaban destinados a vivir una aventura juntos, una aventura que desafiaría todas las normas del extraño país de las maravillas en el que se encontraban.
Y así, bajo la luz de la tormenta y el tic-tac de los relojes enloquecidos, Alicia y Julius se embarcaron en un viaje hacia lo desconocido, donde descubrirían el verdadero significado del amor y la magia que podía surgir de la adversidad. ¿Qué les depararía el destino en este mundo lleno de misterios y secretos por desvelar?